Taipéi, febrero 2 (CNA) La compañía estatal de electricidad de Taiwán (Taipower) descartó el viernes 1 la posibilidad de activar la Cuarta Planta de Energía Nuclear y dismintió la idea errónea de que solo se tardarían tres años en hacerlo.
En su comunicado de prensa, Taipower indicó que se tardarían al menos seis o siete años para iniciar las operaciones comerciales de la Cuarta Planta de Energía Nuclear, sita en la Ciudad de Nueva Taipéi, que han sido suspendidas desde julio de 2015 por la oposición de activistas ambientales a los peligros potenciales de la energía nuclear.
Citando la última resolución legislativa alcanzada en el 2018 con respecto al tema, Taipower enfatizó que se requiere retirar todas las varillas de combustible nuclear de la mencionada planta antes de fin del 2020. Además de eso, Taipower también señaló algunos problemas importantes si la citada planta se activara.
Según la empresa estatal de energía, la General Electric Co., con sede en Estados Unidos, no es capaz de reemplazar los componentes obsoletos del reactor nuclear avanzado de agua en ebullición (ABWR, siglas en inglés), que se instaló en la mencionada planta hace más de 20 años, ya que la compañía estadounidense ha dejado de producirlos.
Además, Taipower también puntualizó que el proceso de restaurar el proyecto de la Cuarta Planta de Energía Nuclear llevaría mucho tiempo, ya que implica dificultades para reasignar los presupuestos en la Legislatura y renovar una solicitud al Consejo de Energía Atómica para que ponga fin a la suspensión de la citada planta nuclear y realice pruebas y exámenes que en totalidad, llevarán al menos seis o siete años.
La declaración de Taipower se produjo un día después de que el Ministerio de Economía (ME) diera a conocer una política energética nacional revisada que determinó que la Primera Planta de Energía Nuclear quedará fuera de servicio según lo programado, los tiempos de servicio de la segunda y la tercera plantas nucleares no se ampliarán, y el proyecto de la cuarta planta no será reiniciado.
El ministro de Economía, Shen Jong-chin, dijo el jueves 31 en una conferencia de prensa que se decidía que "no habrá extensión o reinicio de las centrales nucleares en Taiwán, debido a las condiciones subjetivas y objetivas, así como a la fuerte objeción pública".
Pero en línea con el resultado del 7º referéndum del 24 de noviembre del 2018, la potencia térmica se reducirá anualmente uno por ciento en el 2019 y el 2020, respectivamente, dijo Shen.
Ante esto, el Ministro de Economía advirtió de que Taiwán sufrirá una escasez de electricidad a partir del 2021, dada la creciente demanda eléctrica, pero no explicó adecuadamente por qué la estructura energética del Gobierno permanece sin cambios al tiempo que asegura que se alcanzará una capacidad de generación de energía reservada del 15 por ciento.
De acuerdo con las proyecciones anteriores del ME, la estructura energética de Taiwán para el año 2025 estará compuesta del 20 por ciento de energía verde, 50 por ciento de gas natural y 30 por ciento de carbón.
Ésto indica que la Administración de la presidenta Tsai Ing-wen se adherirá al objetivo de hacer de Taiwán un país libre de energía nuclear para el 2025 a pesar de los reiterados llamamientos para reiniciar la Cuarta Planta de Energía Nuclear y los resultados de los referendos del 24 de noviembre sobre este tema.